martes, 30 de marzo de 2010

Lorrie Moore, Al pie de la escalera


Os aseguro que no conocía a Lorrie Moore hasta hace poco. Hasta que cayó entre mis manos Pájaros de América (1998), una colección de cuentos magnífica. Creo que no había sido tan feliz desde que descubrí a Tobias Wolff.

De estos cuentos salté a la novedad que hoy recomiendo, la novela Al pie de la escalera. Publicada por Seix Barral en 2009, esta historia íntima de personajes que se contradicen, que no saben bien hacia dónde se dirigen, ha colmado mis expectativas.

El lector asiste al primer año de universidad de Tassie, una chica de campo que llega a la ciudad para estudiar. Busca trabajo y es contratada como niñera por una pareja que va a adoptar un bebé. La protagonista se va involucrando cada vez más con esta familia y con la niña afroamericana que adoptan. Y hasta aquí puedo leer.
Con una visión incisiva de la sociedad y la cotidianidad familiar, la autora sortea varios temas complejos, como la adopción, la maternidad, los prejuicios en torno al racismo y, lo que más nos gusta, la desolación de ciertas pasiones, sobre todo las juveniles.

Tal vez la forma del cuento es la que más se adapta a su escritura, pero en esta novela encontraremos todas las sustancias indicadas para volvernos moore-adictos: diálogos más que verosímiles, imágenes y metáforas ocurrentes, una capacidad descriptiva poco común y ese humor envenenado, como escape al dolor, del que la propia autora habla en los términos siguientes.
“El humor es un consuelo para las personas. Entonces la historia sigue siendo triste pero el humor la completa, la hace verdadera, la convierte en parte de la vida.”

Por cierto que Tassie tiene algo del Holden Caulfield de El guardián entre el centeno, del que algún día hablaremos.

lunes, 29 de marzo de 2010

Marguerite Yourcenar, Memorias de Adriano


Si alguna vez tuviese que ser un emperador romano, yo quiero ser Adriano, pero no el Adriano histórico, sino el Adriano novelado de Marguerite Yourcenar, ese personaje contrapuesto entre su faceta de emperador, de hombre de Estado, y su lado más individual, íntimo, con sus ambigüedades, sus reacciones violentas ante la disolución, que él intuye próxima, del mundo en que vive.

A mí me gusta ponerles cara a mis personajes y a los autores que leo. Marguerite Yourcenar nació en Bruselas en 1903. Recibió una educación esmeradísima y estrictamente privada. Su padre le enseñó latín a los diez años y griego clásico a los doce. También le inculcó el amor por los viajes, la pequeña Marguerite le acompañaba en todos ellos. Con este debut, sólo podía ser especialista en cultura clásica y esa calidad, ese rigor, emerge en su obra.

Memorias de Adriano se publicó en 1951 y podemos leer la espléndida traducción al español de Cortázar. La obra reconstruye en primera persona la vida del más ilustre de los emperadores, profundamente helenizado y conocedor de la tradición oriental, libre y solitario, sensible y culto.

Se habla de muchos temas en este libro, como la angustia de la muerte y la voluntad de vivir con consciencia, el perfeccionamiento interior constante en tanto que deber vital, y se hace a través de una prosa con aliento poético, insólita en su refinamiento y su hondura. Sin embargo, esto no debe echar para atrás a los lectores principiantes o esporádicos: la novela compagina la excelencia estética con el haber sido traducida a muchísimos idiomas, en las más variadas ediciones. O sea, que gusta, que engancha.

Hay citas del libro como para llenar un cuaderno, pero una resume como nada el espíritu del emperador agonizante y la filosofía de vida serena y estoica de la que deberíamos tomar buena nota: “Tratemos de entrar en la muerte con los ojos abiertos”.

A través de esta vida, de la antigüedad clásica y sus códigos, ¿acaso no podremos hallar las claves de las tragedias contemporáneas?

viernes, 12 de marzo de 2010

Antoine de Saint-Exupéry, El Principito



Saint-Exupéry salía en los billetes azules de 50 francos, sin gorro de cuero ni gafas de aviador, aunque yo siempre lo he recordado de esa guisa. Era la época en la que la aviación era una actividad incipiente y arriesgada. En la Segunda Guerra Mundial, su avión fue abatido por un piloto alemán en la costa cercana a Marsella y desapareció en el mar. El piloto alemán leía las obras de Saint-Exupéry, todos los aviadores lo admiraban, aunque en la batalla les hubiese tocado luchar en bandos enemigos. No supo a quién estaba disparando.

Hay otros libros de él que nos gustan, que se inspiran en su propia experiencia como piloto pionero de los vuelos postales internacionales. Recordemos Correo del Sur, Vuelo nocturno o Tierra de Hombres.
El Principito apareció publicado por primera vez en 1943. Parte de un suceso real: Saint-Exupéry sobrevivió a un aterrizaje forzoso en el desierto del Sahara con su avioneta, pero sufrió deshidratación y alucinaciones hasta que, tras cuatro días de soledad e inanición, un beduino lo rescató.

En sus escasas 120 páginas, salpicadas de las estilizadas ilustraciones del propio autor, el narrador de la historia, un aviador extraviado en el desierto, conoce al Principito, un niño que proviene de un asteroide y que le cuenta su historia. Ha viajado por seis planetas, cada uno de ellos habitado por un personaje diferente y simbólico: un rey, un vanidoso, un borracho, un hombre de negocios, un farolero y un geógrafo.

Todos ellos demostrarán, a su manera, lo vacías que se vuelven las personas cuando se transforman en adultas, cómo vamos perdiendo la noción de lo que es de verdad importante en la vida, al mismo tiempo que nos llenamos de vicios como la soberbia, la inconstancia, la vanidad o la artificialidad.

Os recomendamos esta obra porque es un clásico de la literatura, de esos que no dejan indiferente. Es un libro metáfora, una cebolla a la que se le pueden ir quitando capas y llegar hasta el meollo más filosófico de la existencia humana. O, simplemente, quedarnos en la superficie de una historia fantástica y bella, como la delicada rosa que ama el Principito.

Puede parecer un libro para niños, por la forma en que está escrito, por las ilustraciones, pero en realidad trata temas profundos como el sentido de la vida, la amistad o el amor. Leámoslo con nuestros niños: a ellos les encantará y a nosotros, adultos atrapados en nuestro mundo de obligaciones, cifras, trabajos y rutina, nos volverá a conectar con lo esencial, con esos corazones de niño que durante tanto tiempo nos hemos esforzado en acallar.

Os dejo con una cita del libro, de esas que son como para apuntar en la agenda y llevarla siempre con nosotros: “He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos."

Y para fans, esta web muy recomendable, en inglés y francés, porque la literatura no acaba cuando llegamos al punto final: www.lepetitprince.com

jueves, 11 de marzo de 2010

Aquí empieza nuestra historia, de Tobias Wolff




Aquí empieza nuestra historia es el último libro del estadounidense Tobias Wolff, editado por Alfaguara en abril de 2009. Me pregunto si alguna vez llegaré a hartarme de los narradores americanos, de sus historias cotidianas y descarnadas, de su maestría en la construcción del relato, pero, mientras tanto, seguiremos recomendando a estos autores. La ilustración de la portada es un buen aperitivo de lo que encontraremos dentro: un buzón típicamente americano, un coche, una mujer que mira sin que le veamos la cara. Ya nos estamos preguntando quién conduce, si es el coche de ella, si de un momento a otro lo va a utilizar para esa huida latente.

Tobias Wolff es un tipo curioso, de sonrisa franca y bigote. Nacido en Alabama en 1945, es fundamentalmente un autor de cuentos. Otros libros de relatos que recomendamos son Cazadores en la nieve (no os perdáis el maravilloso cuento que da título al volumen o el titulado “En el jardín de los mártires norteamericanos”), De regreso al mundo, La noche en cuestión. Ha dado clases de escritura creativa en universidades de Estados Unidos y tuvo entre sus colegas a Raymond Carver, con quien a menudo se le relaciona. No exageramos si decimos que es uno de los cuentistas vivos de más prestigio mundial.

En Aquí empieza nuestra historia encontraréis 31 cuentos, de los cuales 21 ya han aparecido en otros libros anteriores y 10 son cuentos nuevos. En cierta medida, es un libro “antología”, para leer los que él mismo considera sus mejores cuentos.

Tobias Wolff huye de los personajes muy marcados y grandilocuentes y prefiere las vidas ordinarias, le encantan los perdedores, los traumas de la infancia o de la juventud, las meteduras de pata, los errores, los comportamientos imprevisibles o irascibles, y los cuenta a modo de crónica. Sus personajes nos atraen porque escribe con detalles concretos y araña de forma sutil en los pequeños conflictos. Niños que mienten, hermanos que no se entienden, parejas en las que reina la incomunicación pero en las que todo parece de lo más normal, es decir, circunstancias cotidianas que, cuando las observamos de cerca, como el fango mirado al microscopio, resultan extraordinarias.

Un libro fácil de leer, gracias a que el autor utiliza un lenguaje sencillo, declarativo, en el que la voz narrativa no se implica sobre esos personajes a veces apáticos, perdidos. Los finales son en general abiertos, como la vida, que continúa. No importa tanto el final sorpresivo, que no suele darse, ni la trama, sino la sensación, la impresión, la inquietud y la molestia que queda al llegar al último punto y, en el mejor de los casos, la lucidez que nos invade.

Lo recomendamos a lectores adultos que gusten de historias reales. No os defraudará.

lunes, 8 de marzo de 2010

Bienvenidos al blog de la sección de libros de “No apagues la luz”


Las nuevas tecnologías son menos fieras de lo que las pintan.

Inauguramos hoy este blog dedicado a la sección de libros del programa de Popular TV Navarra “No apagues la luz”.
Para todos aquellos que os quedasteis con ganas de apuntar el título de esa novedad editorial. Para los que os habéis leído la novela que presentamos la semana pasada y os gustaría dejarnos vuestro comentario. Para los que queréis que hablemos del libro que os dejó un recuerdo diferente.
Para todos vosotros, lectores y telespectadores, este punto de encuentro y disfrute de la literatura.

En los próximos días iré colgando los resúmenes de los programas anteriores. Espero que os guste y que os animéis a leer nuestras sugerencias.